La Bolsa de Nueva York cerró este martes en terreno positivo, impulsada por las expectativas generadas en torno a los resultados trimestrales de Nvidia, el gigante de los semiconductores, que se darán a conocer mañana. El Dow Jones de Industriales registró un leve avance del 0.02%, cerrando en 41,250 puntos, marcando así su segundo récord consecutivo.

El S&P 500 y el Nasdaq también experimentaron ligeras subidas, ambos con un incremento del 0.16%, cerrando en 5,625 y 17,754 puntos, respectivamente. El optimismo de los inversores ha crecido desde la confirmación de la Reserva Federal (Fed) la semana pasada sobre la reducción de los tipos de interés en su próxima reunión de septiembre.

Nvidia, que ha sido un motor clave para Wall Street durante este año gracias a su liderazgo en el sector de la inteligencia artificial (IA), vio un aumento del 1.5% en sus acciones este martes. La empresa ha visto su capitalización de mercado expandirse aproximadamente nueve veces desde finales de 2022, reflejando el auge de la IA.

Ross Mayfield, de la firma de servicios financieros Baird, comentó a CNBC que, más allá de Nvidia, hay pocos datos económicos relevantes, por lo que el mercado se encuentra en una especie de espera.

En cuanto a los sectores, el tecnológico fue el más beneficiado con una subida del 0.63%, seguido por el de finanzas con un 0.48%. Por otro lado, los sectores de energía (-0.93%), servicios públicos (-0.74%), y bienes esenciales (-0.47%) registraron pérdidas.

Entre las 30 empresas del Dow Jones, Nike (1.20%), Honeywell (1.11%), y Visa (0.94%) destacaron con las mayores ganancias.

En otros mercados, el petróleo de Texas cayó más del 2%, cerrando por debajo de los 76 dólares por barril, después de haber registrado el lunes su mejor día en dos semanas. Esta caída se atribuye a la interrupción de la producción de crudo en Libia y los ataques de Israel a la milicia chií libanesa Hizbulá.

Finalmente, al cierre de la jornada, el rendimiento del bono a 10 años se mantuvo en el 3.82%, el oro subió a 2,559 dólares la onza, y el dólar retrocedió frente al euro, con un cambio de 1.1181.