Decía Diógenes, que “el movimiento se demuestra andando” y esto es lo que la alcaldesa de Nanchital, Esmeralda Mora Zamudio  viene haciendo desde antes de asumir el poder, con la alentadora  noticia que muy pronto con el respaldo de su amiga Rocío Nahle García, Secretaria de Energía, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) repontencializará la subestación Nanchital para reducir al mínimo los apagones que históricamente han dañado el patrimonio de miles de familias.

La problemática de los apagones no es privativa de Nanchital, es de carácter nacional porque los gobiernos priístas y panistas, dejaron de invertir en la CFE para quebrarla y venderla a manos extranjeras como chatarra. Esa es la verdad. Cinco años no han sido suficientes para levantar una industria maltrecha y vetusta que por más de medio siglo funcionaba de puro milagro.

Por fortuna para México y Veracruz, el presidente Andrés Manuel López Obrador depositó toda su confianza en la ingeniero Rocío Nahle para salvar la industria eléctrica y vaya que ha cumplido con creces, sin olvidar jamás el sur; la tierra que la adoptó allá por los años 80’s, década en la cual conoció a una de sus primeras amigas: Esmeralda Mora Zamudio, cuando juntas constataban cómo funcionarios inescrupulosos de Pemex desvalijaban los complejos petroquímicos Cangrejera y Pajaritos. Toda una vida de vivencias, pero sobre todo de lealtad mutua.

Hoy la historia ha colocado a cada quien en posiciones en las que el principal compromiso es con el pueblo. Por eso Esmeralda Mora –cuando visitaba a los nanchitecos en sus hogares y le expresaban estar cansados del mal servicio de la CFE- fue elaborando un grueso expediente que se transformaría meses antes de asumir la alcaldía, en un proyecto que le entregó a su amiga Rocío Nahle, para poder fin a esta problemática.

En menos de dos años, Mora Zamudio con el evidente respaldo de la poderosa Secretaria de Energía, ha logrado iluminar el 100 por ciento del territorio nanchiteco con una nueva red de alumbrado público, mismo que por su alta tecnología, le está significando grandes ahorros a su gobierno, por el bajo consumo de electricidad.

No obstante la piedrita en el zapato continuaba, debido a los “odiosos” apagones, cuyo origen tiene una explicación lógica: La subestación Nanchital Uno fue construida cuando Nanchital no rebasaba los 30 mil habitantes.

Sin embargo los años transcurrieron, los nanchitecos (y nanchitecas por aquello de la equidad de género) se reprodujeron y hoy con casi 55 mil pobladores, las sobrecargas dan al traste con la pequeña subestación.

Por ello hoy, desde el fraccionamiento San Miguel y ante funcionarios de alto nivel de la CFE, Esmeralda Mora hizo un público agradecimiento a su amiga y aliada Rocío Nahle, “por impulsar dijo,  en primer lugar  la modernización del alumbrado público y ahora con la repontencialización de la subestación eléctrica”.

En sus muestras de gratitud, Mora Zamudio no pasó por alto el reconocimiento al presidente Andrés Manuel López Obrador por voltear siempre hacia la región sur de Veracruz, en donde desde 1990 encontró amigos y aliados comprometidos con su proyecto alternativo de nación.

El anuncio de Mora Zamudio ante familias del referido fraccionamiento fue avalado por representantes de la CFE, quienes explicaron que a la brevedad iniciaron los trabajos de ampliación de la subestación, con un nuevo circuito que aumentará la capacidad eléctrica del municipio en vísperas del gran detonante de desarrollo que se impulsa desde el Gobierno Federal a través del Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por este y otros logros, Rocío Nahle y Esmeralda Mora Zamudio  están haciendo historia….y lo que viene para Nanchital es algo sin procedentes.